Convocatoria abierta
Hasta el próximo 1 de septiembre, El Cubo mantiene abierta una convocatoria para seleccionar hasta 10 startups que formen parte del programa de aceleración que se desarrolla en este centro de crowdworking de Andalucía Open Future. Con la idea de conocer mejor cómo se trabaja en El Cubo y quiénes son los profesionales que acompañan a los emprendedores durante el programa, os iremos mostrando algunos detalles del día a día en nuestro espacio y qué recursos ponemos al alcance de las startups seleccionadas. Hoy entrevistamos a Rubén Vázquez Romero.
Una de las áreas en las que trabajamos dentro del programa de aceleración de El Cubo es el área legal; tanto desde el punto de vista societario (constitución como empresa, pacto de socios, etc.) como desde el punto de vista del derecho digital o la privacidad en Internet.
Dentro de nuestro equipo de mentores se encuentra Rubén Vázquez Romero. Es abogado y consultor especializado en empresas de Internet. Colabora con El Cubo desde la primera edición. En esta nueva convocatoria, también asesorará a las startups que formen parte del programa.
Preséntate, ¿quién es Rubén Vázquez Romero?
Soy un abogado y consultor tecnológico especializado en Internet. Llevo trabajando más de 7 años con varias startups andaluzas así como escribiendo acerca del fenómeno de la innovación tecnológica asociada al derecho (desde el e-commerce hasta la privacidad pasando por cosas como el futuro f-commerce). Soy blogger y vlogger, ponente y bastante friki haciendo todo este tipo de cosas. Intento a través del sentido del humor y la cultura de Internet acercar el derecho a la gente.
¿Cómo fue tu primer contacto con El Cubo? ¿Qué fue lo que más te llamó la atención o te atrajo de la iniciativa?
Aún recuerdo cuando un «conocido blogger» me pidió una dirección de correo electrónico vía Twitter para comentarme un «asuntillo legal» que se traía entre manos.
Ni de lejos pensaba que se trataba de El Cubo. Cuando me escribió ese correo concertamos una reunión para ver en qué podíamos trabajar al respecto. Nunca olvidaré esta primera reunión con la dirección de El Cubo y la Consejería de Empleo, Empresa y Comercio; acudí al encuentro con chaqueta y corbata y, tras las presentaciones, me preguntaron que por qué el traje y la corbata si ya me habían visto en mis vídeos de YouTube…
Lo que más me llamó la atención de El Cubo fue la posibilidad de poner a Andalucía y Sevilla en la primera plana tecnológica y de innovación, en especial en una ciudad tan clásica en tantas cosas y teniendo la posibilidad de poder formar parte de ese cambio… Yo ya tenía experiencia previa con startups y aceleradoras tanto en Sevilla como en el resto de España. Por tanto, poder hacerlo en mi propia ciudad y en un proyecto de mayor envergadura, hizo que estuviera sumamente interesado en colaborar.
¿Cuál es la labor de un mentor?
Reñir a los emprendedores… Ahora en serio, la función de un mentor es ayudar a las empresas a crecer y eso se traduce en apoyo, asesoramiento, contactos. Todo eso que los que llevamos en este mundillo ya hemos aprendido e intentamos transmitir. En mi caso especialmente, hacerles ver todos los riesgos jurídicos a los que se enfrentan, cómo minimizarlos o suprimirlos.
¿En qué áreas has trabajado como mentor en El Cubo?
Principalmente, mi área de trabajo es la de legal, en especial, el apartado relativo a Internet. Es decir, marketing digital, contratos telemáticos o privacidad entre otros ámbitos, sin olvidar cuestiones como competencia, societario o asesoramiento en constitución. No obstante, al ser una gestión integral, a veces me llegan a plantear cuestiones de marketing o ventas, donde algo, aunque sea poco, también trato de echarles una mano.
¿Cómo ha sido tu experiencia? ¿Qué destacarías?
La experiencia ha sido principalmente gratificante. Ver cómo las startups crecen y se van haciendo más fuertes en un mercado tan competitivo como el de Internet, es siempre es un placer y digno de admiración por el esfuerzo puesto por los emprendedores.
En lo personal, ser capaz de poner mi grano de arena a algo como esto algo excepcional.
¿Por qué es importante trabajar el área legal dentro de un programa de aceleración como el de El Cubo?
En mi experiencia como abogado, la mayor parte de los inconvenientes legales que encuentran las empresas, en especial en el mundo digital, derivan de una precaria base legal establecida. Dicho de otra forma, aspectos básicos como un buen pacto de socios o unos contratos bien fundamentados. Si se preparasen bien en el arranque de la empresa, se evitarían muchos problemas.
Por tanto, la importancia del área legal es exactamente ésa; preparar a las empresas para que, cuando salgan al mercado, vayan por con las mayores garantías posibles, tanto para ellas como para sus clientes y posibles inversores.
¿Qué puede aportar un programa de aceleración como El Cubo a los emprendedores andaluces?
Puede aportar todo, desde los contactos necesarios para empezar a andar, el acceso a financiación, el acceso a inversores, a mejorar sus productos, y por su puesto, a contar con un cumplimiento legal completo.
¿Qué le dirías a un emprendedor que tiene dudas en presentarse a la convocatoria de El Cubo?
Que no lo dude, que es una oportunidad para crecer y crecer mucho. Lo único que se le va a pedir son las ganas de trabajar. Si tiene eso y una idea de negocio viable, El Cubo es su sitio.
¿Cómo ves la situación para las startups andaluzas?
La situación es precaria. No obstante, poco a poco, y gracias a iniciativas como El Cubo y Andalucía Open Future, las posibilidades se amplían. Y si a eso le sumamos el crecimiento de un mercado tan emergente como éste, que previsiblemente crecerá aún más que la media, hacen que la situación vaya teniendo mucha mejor perspectiva.